lunes, 2 de diciembre de 2019

¿QUERÉS VER LA PELÍCULA?

Si querés ver “Bepo”, podés hacerlo por internet.
Escribir un mensaje a
lamirilladoc@hotmail.com
o a nuestro facebook.com/BEPOlapelicula/
con el asunto “el croto Bepo” y contanos en pocas líneas como conociste la película y porque te interesa verla.
Luego te enviaremos un link de visualización.
Gracias por interesarte en nuestra producción
La Mirilla Cine


jueves, 14 de diciembre de 2017

TODAS LAS CRÍTICAS


-  "El director Marcelo Gálvez recorre con su cámara atenta el andar de ese Bepo soñador al que Luciano Guglielmino dota de enorme ternura, secundado por un elenco que otorga verdad a esta historia plena de emoción."
 Adolfo C. Martínez/Diario La Nación

- "Con buenos trabajos actorales, Gálvez consigue recrear el romanticismo de estos vagabundos de otra época, lúmpenes vocacionales con moralejas universales."
Gaspar Zimerman - Diario Clarín

 - "Es un film quijotesco, intelectual y con un espíritu de aventura libre. Un film que no traiciona al personaje, por el contrario, lo refleja con lenguaje cinematográfico. Esa riqueza de interpretación no es habitual en el cine de hoy en día".
Rodolfo Weisskirch – Visión del cine

- “Bepo” es un film con gran profundidad, de acentos importantes en lo que respecta a los valores de vida y las consecuencias de la libertad sin límite". 
 CinÉfilo serial web – Crítica de Noelia Giacometto

- "Propone un viaje revelador hacia un mundo de linyeras y anarquistas, encarado como una "rail movie" donde el personaje intenta trazar su propio camino de vida".
 Claudio Minghetti –Télam

- "La referencia del protagonista a Don Quijote de La Mancha invita a pensar en el ferrocarril como en el Rocinante de estos otros idealistas que no enfrentarán molinos de viento pero sí un Estado que los persigue”.
 María Bertoni – Espectadores.com.ar

 - "Esta es una película distinta, donde lo sensorial está a la par de lo narrativo y quizás por eso vale la pena ser vista".
 Alberto Ponce – SAE Editores

- "Una producción que acierta al exhibir una temática poco explotada en nuestro cine." 
Funcinema – Crítica de Brian Macchi

- "Un auténtico propagandista del pensamiento libertario, la amistad y la solidaridad teniendo mucha tierra bajo sus pies y mucho cielo sobre su cabeza".
 El espectador emancipado blog – Crítica de Liliana Isod

- "Esos trenes en movimiento traducen la inquietud de espíritu de un hombre que no resiste ataduras". 
Subjetiva web – Crítica de Marcela Bárbaro.

- "Desde la puesta en escena y la utilización mínima de recursos, con austeridad, el director consigue plasmar en pantalla un espíritu de época".  
 Cinefreaks.com – Crítica de Pablo Arahuete

- "Hombres que eligen vivir al sereno, o bajo puentes, siempre inquietos, siempre anhelantes por seguir el camino, apegado en este caso a las vías del ferrocarril y sus trenes de carga como una invitación al movimiento continuo."
 Crítica de Catalina Dlugi

- "De estructura sencilla y con una producción algo austera, no necesita de más para establecer los propósitos que pretende. Fuertemente ideológica sin necesidad de ser declamatoria ni "machacadora", con personajes entrañables, y con conciencia de los recursos con los que se cuenta para aprovecharlos al máximo. Una película que vale la pena." 
Fernando Sandro

- Bepo es una película que invita, -desde el silencio que acompasa el viajar del protagonista y hasta los diálogos que mantiene con sus circunstanciales acompañantes- a reconocer en el paisaje la búsqueda de una respuesta interior, profunda e inmensa que nunca termina... De ahí la elección del viaje... Y de la escritura como soporte de una búsqueda...
Todo un desafío y una victoria en el campo minado de nuestro cine.” 
María Valdez 


REFLEXIONES DE HUGO NARIO

Con la presencia de Hugo Nario, el autor de la novela "Bepo, vida secreta de un linyera", se presentó la película en el Galpón de las Artes (Mar del Plata).

"Logró escribir con su cámara, con su ingenio, a otro Bepo , otra historia diferente a la que yo he narrado. Lo que me conmovió mucho y eso por supuesto yo no lo podía escribir, es como incorporó las vistas, los campos, los cielos, las vías... a esta historia. Yo digo que no es una película basada en un libro, sino una creación, una recreación, que me conmueve haberla sugerido y ... como podría decirlo?... eh... haberlo toreado, antes de que se largara a hacer esto." (Hugo Nario, tras ver la película por primera vez en una sala).





martes, 27 de junio de 2017

PREMIOS PARA "BEPO"

FESTIVAL DE CINE DE CHASCOMÚS 2017
PREMIOS COMPETENCIA DE LARGOMETRAJES

Consideraciones del Jurado.
Lautaro Delgado, Guillermo Hernández, Pilar Gamboa.

“BEPO” , de Marcelo Gálvez.
Por considerarla de gran valor narrativo , existencial y la excelente elección y dirección de actores, sumado a una precisa puesta en escena.

MENCIONES DEL JURADO
Mejor actor: Edgardo Desimone, por Bepo

lunes, 1 de agosto de 2016

GALERIA DE FOTOS



















EL MUNDO DE LOS "CROTOS"

Fragmento del prólogo de libro "Bepo, vida secreta de un linyera", de Hugo Nario

 Durante las primeras décadas del Siglo XX los trenes de carga de la Argentina solían llevar en sus vagones a decenas, centenares de pasajeros furtivos. En los años de crisis llegaban a ser miles, decenas de miles. Solía vérselos también a orillas de las vías junto a pequeños fuegos en los que hervía, dentro de recipientes negros de tizne, el agua o la comida. Parecían transitar un mundo de silencio, era evidente su hambre, tangible su frío y manifiesta su soledad.
 
 En las ciudades se les temía y se asustaba a los niños invocándolos. Si faltaban aves de corral o ropas del cordel, sobre ellos recaía la sospecha. A veces, policías a caballo los arreaban como a ganado por las calles del pueblo rumbo a la Comisaría. Luego, los empujaban nuevamente a subir a los cargueros y continuar su errabundia.
 
 Asomaban entonces sus cabezas por sobre el borde de los vagones, como prisioneros de una cárcel ambulatoria, espectadores en tránsito de un mundo del que procedían, pero que ahora les era ajeno y los rechazaba. Se sabía de muchos de ellos que, finalizado el verano, convergirían hacia las zonas maiceras del país, para juntar a mano el cereal.
Que luego bajarían hacia el sur, buscando chalares tardíos. Que otros remontarían hacia el Chaco o el Tucumán, hacia Cuyo o hacia el Valle del Río Negro. Que muchos, en fin, concluido el tiempo de recolección, retornarían a sus pequeños poblados rurales donde les aguardaban familias y penurias.
  A principios de siglo, en cambio, casi todos habían venido de Europa y como tras de la cosecha regresaban, se les llamó golondrinas. Habían traído un atadito de ropa al que nombraban la linghera. Luego, a ellos mismos comenzó a llamárselos así. Se cree que un gobernador de Buenos Aires, José Camilo Crotto, dispuso que en la provincia viajaran gratuitamente en los trenes de carga y que por eso desde entonces se les decía también crotos.


Muchos jóvenes, especialmente del interior, salían a crotear nada más que por afán aventurero. Pero casi todos lo hacían en busca de oportunidades laborales de las que carecían en su pueblo. En tiempos de recesión económica, comerciantes y chacareros que se arruinaban y muchos obreros que quedaban sin trabajo, desesperados o desencantados, se automarginaban en la vía y los linyeras se multiplicaban.
Por último, se suponía que algunos de ellos no volverían a hogar alguno porque ya no lo tenían, sino a la vía, que por ella vagarían todo el año, toda la vida, hasta que -uno imaginaba- el frío o un accidente acabase con ellos.
Los que alguna vez estuvieron más cerca de sus vidas -ferroviarios, chacareros o policías- saben que tenían una jerga particular. Que llamaban tártago al mate, maranfio al guiso, mono al atadito de su ropa, bagayera a la bolsa en la que guardaban sus cacharros, y ranchada al sitio en que acampaban.
 
Como hacían del silencio un ejercicio, su vida era impenetrable, y ante la imposibilidad de conocer sus razones, se fantaseaba. Se hablaba de que entre ellos había intelectuales perseguidos, hombres a quienes un desdeño de amor arrojaba en busca del olvido. A veces les requisaban propaganda del ideal libertario. Otras descubrían entre ellos a delincuentes buscados por la autoridad: gente que debía muertes o prisiones. Sí, se fantaseaba. O no. Pero todas las actitudes que se les atribuían tenían una constante: la evasión.
 Su historia estuvo ligada a otra faz del desarraigo argentino: la de su agricultura chacarera, pilar de su casi bíblica prosperidad, desde principios de siglo y no obstante su cenicienta esencial, arruinada sin redención desde 1940.
Recorrían aquel desolado cuerpo de gigante en los trenes de carga; del maíz al frío, del frío al maíz, braceros en tiempos de cosecha, perseguidos por vagos y por crotos en los de la espera. Y nunca se supo mucho más de ellos; su silencio y la soledad se interpusieron.

sábado, 30 de julio de 2016

JOSÉ ÁMERICO "BEPO" GHEZZI: EL "CROTO" MÁS FAMOSO

"Bepo" decía que buscaba la libertad y el tiempo lo transformó en leyenda.
El escritor Hugo Nario escribió una novela biográfica, la cineasta Ana Poliak realizó un film documental y varios medios gráficos y televisivos se acordaron de él.
Su logro fue viajar durante un cuarto de siglo sobre el techo de los trenes de carga y vivir heroicamente a orillas de las vías, con hambre, con frío, con penas y alegrías, en el largo y angosto país de los crotos.


PUBLICACIÓN DE LA REVISTA "TODO ES HISTORIA" - JULIO DE 1980



        

         


FOTOS PUBLICADAS EN EL LIBRO "VERSOS Y OTRAS YERBAS"